Como ya se sabe, en el supermercado pueden encontrarse dos clases de huevos: color blanco y color marrón.
Sin embargo, ¿hay diferencia entre estas variedades de blanquillos? A continuación, compararemos las características de los huevos blancos con los huevos marrones para aclarar todo mito que existe entre ellos.
Existen cuatro aspectos por los cuales se comparan los huevos y consideran que su color determina su calidad o su sabor; sin embargo, muchas de las creencias que se tienen sobre los huevos blancos y los huevos marrones no son reales, por lo que aquí intentaremos despejar algunas de las dudas que tengan sobre este nutritivo alimento.
- La gallina determina el color de los huevos: El color de los huevos es de acuerdo al color de la gallina que los pone la mayor parte del tiempo, siendo las gallinas blancas las que ponen huevos blancos y las gallinas marrones producen huevos de ese color; sin embargo, esto puede variar, pero no afecta en absoluto el contenido nutricional.
- Los huevos marrones son más grandes: Esta es la principal razón de porque suelen ser más costosos que los huevos blancos, pero el tamaño no significa que los huevos marrones son de mejor calidad. La explicación es bastante lógica: gallinas grandes ponen huevos grandes, y es por eso que requieren más alimento, por lo que ese gasto debe de compensarse.
- No existe diferencia en el cascarón: Se tiene la creencia de que los huevos marrones son más resistentes que los huevos blancos, pero esto es completamente falso; el color del huevo no determina el grado de resistencia. Sin embargo, aquellos huevos puestos por gallinas jóvenes son más duros que por animales maduros.
- El color de la yema no altera los nutrientes: Este aspecto tampoco varía por el color del cascarón; en realidad la diferencia de color y olor de la yema es parte de la alimentación de la gallina. Mientras consuma más cantidad de maíz, la yema suele ser más oscura.
Esperamos que esta lista les haya ayudado a comprender mejor la diferencia entre las diferentes clases de huevos; como pueden ver, no varían mucho los huevos blancos de los marrones, a excepción de pocos detalles insignificantes, así que la elección de comprar el huevo de su preferencia no implica mayor o menor grado de nutrientes.